El petróleo se dispara un 4% al calor de la renovada tensión geopolítica en Oriente Medio. Irán no ha tardado en responder a Washington por el asesinato de Soleimani y ha atacado dos bases estadounidenses en Irak: Al Asad e Irbil. El Pentágono ha confirmado el ataque y asegurado que tomarán "todas las medidas necesarias" para proteger a su personal.
Con esto en mente, el barril de West Texas, referencia en EEUU, avanza un 4,5% hasta los 65,65 dólares, máximos de abril de 2018. A su vez, el de Brent, referencia en Europa, ha llegado a subir un 4% hasta los 71,75 dólares por barril (su futuro continuo), máximos marcados en septiembre de 2018.
"Creo que los inversores anticipaban una represalia iraní pero no sobre las tropas estadounidenses", sostienen los expertos de Tudor, Pickering, Holt & Co. "Las 48 horas serán decisivas para los mercados dependiendo de la respuesta de EEUU", apostillan.
"Debemos esperar a conocer el informe completo de lo ocurrido para evaluar la posible respuesta de Washington", apunta el analista John Kilduff. "El West Texas se puede ir fácilmente por encima de los 70 dólares a partir de ahora", añade. El oro negro sigue así con su rally iniciado el pasado viernes, sesión que cerró con un avance del 3%.
Otros expertos como Rebecca Babin, de CIBC Private Wealth Management, quitan hierro al asunto y creen que "actualmente el esquisto está descontando incertidumbre y no un escenario de pánico absoluto".
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