ROMA, 4 may (Reuters) - Rusia y China están aprovechando la
emergencia desatada por el coronavirus para poner por delante sus
propios intereses en Europa, dijo el lunes el secretario de Defensa de
EEUU, Mark Esper, describiendo como malignos los esfuerzos del país
asiático para promover los equipos de telefonía móvil de Huawei.
“(Estados
Unidos) es consciente de que algunos (países) tratarán de utilizar la
pandemia como una forma de invertir en sectores críticos como la
industria y las infraestructuras, algo que a largo plazo tendrá un
efecto en la seguridad”, dijo Esper al periódico La Stampa, cuando se le
preguntó si China y Rusia estaban tratando de ganar influencia en
Italia mediante el envío de ayuda.
“Es casi seguro que
oponentes potenciales intentarán usar sus intereses para poner por
delante sus objetivos y crear divisiones en la OTAN y en Europa”, dijo.
“Huawei y el 5G son un ejemplo importante de esta actividad maligna de
China.”
Los comentarios de Esper llegan en un
momento en que algunos altos cargos de EEUU han culpado a China por el
brote de coronavirus. El secretario de Estado Mike Pompeo dijo el
domingo que había “una cantidad significativa de pruebas” de que el
nuevo coronavirus surgió de un laboratorio chino, lo que Pekín niega
rotundamente. Tanto China como Rusia han ofrecido apoyo a Italia,
enviando médicos, equipos sanitarios y mascarillas al país que fue el
primero de Europa en ser golpeado duramente por el brote.
Los
Estados Unidos han aconsejado durante mucho tiempo a los países que
boicoteen a Huawei, el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones
del mundo, en la implantación de nuevas redes de telefonía móvil 5G, y
también que examinen los equipos de otra empresa china, ZTE.
Washington
dice que este equipamiento podría ser usado por China para espiar las
comunicaciones. Huawei y ZTE niegan que su tecnología represente una
amenaza para la seguridad.
“La dependencia de los
proveedores chinos podría hacer que los sistemas cruciales sean
vulnerables a la interrupción, la manipulación y el espionaje. Esto
pondría en riesgo nuestra capacidad de comunicación y de compartir
inteligencia”, dijo Esper.
La asistencia de Rusia, incluyendo
personal médico del ejército, llamó la atención sobre el limitado apoyo
que Italia estaba recibiendo de la Unión Europea, y tanto diplomáticos
como representantes de la UE y la OTAN lo han visto como un movimiento
geopolítico.
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